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pableras
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Asunto: Una historia creada entre todos
 Publicado: 04 Oct, 2004 - 10:29 PM
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05 Jun 2003 |
Buenas.
Después de la anterior historia, vamos a escribir una nueva...
El objetivo es construir entre todos una historia, similar a la de este post: http://www.diablo2latino.com/tema16630.html pero con la diferencia que tendrá más coherencia, si bien puede ser disparatada/extraordinaria.
¿cómo se hace?
Cada uno podrá poner un único mensaje al día en el que podrá escribir hasta 10 palabras. Hay que intentar seguir una narración lógica, que tenga un sentido, aunque no por ello se implique que no sea fantasiosa.
En el caso de que se escribiesen cosas que carezcan de sentido, no serán incluidas en la historia.
También aprovecho para recordar que las normas de los foros tienen que seguir respetándose...
Aquí empiezo la historia:
| Cita: | Mi nombre es Jorge López y estudio primero de bachillerato en un horrible pueblo maldito llamado "LatinAblo2". Escuchen mi historia...
Todo empezó una mañana en la que hacía mucho frio, y yo me encontraba mal, cansado tras una larga noche de estudio exaustivo de todos los bichos de diablo 2, ya que me examinaba al día siguiente de todos los actos; pero el examenen nunca tendria lugar. Sali de casa tranquilamente, con mi chupa de cuero negro, y las botas negras...caminé por la plaza y de repente vi una figura negra...¡¡¡ERA AKARA!!!, que se acercaba a mi, para pedirme unas moneditas para poder llegar a fin de mes.
- "Pobrecilla" -me dije-. Saqué unos cuantos giles de mi bolsillo, y le quise obsequiar con unos cuantos de ellos...
- "¡guárdatelos! -me dijo-, es otra la ayuda que requiero..."
- "¿Que necesitas?" - le pregunté - "Haré todo lo que me pidas."
- "Veras Jorge, te necesitamos. Todos los heroes han muerto en la espesura, pues hay un alma atrapada que se alimenta de heroes errantes, que viajan en pos de su destino; ese alma pertenece a Diablo, Señor del Terror, que en una época fue derrotado y ahora ha regresado con la intencion de vengarse".
La miré incrédulo entonces ella me dijo: "sigueme a mi mundo.... necesitamos ayuda". Viajamos a través de un portal de color rojo, y al llegar nos encontramos con una terrible imagen: la antaño gloriosa ciudadela de Harrogath se encontraba en llamas. Todos los edificios habían quedado destruídos, ya pocos quedaban por caer. La ciudad había sido atacada por los miembros del clan Mar Afuera.
- "Que es eso que se mueve?" - grité.
- "Es Larzuck" - contestó ella, corriendo a donde estaba tendido.
- "¡La situacion es desesperada!" -dijo Larzuck- "no los podremos contener; en dos semanas no quedará nada que detenga las hordas...".
-"Yo me ocuparé de los esbirros" - grité, sin ni si quiera pensar.
Tantee en mi cinturon y no encontré nada......"Maldita sea" - me dije. Busqué desesperadamente con mi vista, y encontré una espada de hoja mellada que no dudé en utilizar, pues en una esquina acababan de aparecer tres enemigos, los cuales que se lanzaron al ataque gritando "hay estan....MÁTENLOS!"
Los enemigos venían enfurecidos hacia mi, mientras yo permanecía quieto. El primero me atacó y con una finta conseguí cortarlo en dos, como si de un tomate se tratara. Negra sangre cubría la hoja de mi espada, casi quebrada, pero sabía que no bastaba, necesitaba algo más efectivo. En ese momento, Akara recitó unos salmos sagrados, y unas extrañas runas brillaron, que se concentraron en la espada, la cual refulgió en mi mano. Akara dijo: "Ésta es COLMILLO DE ACERO, la espada legendaria". Instantaneamente realicé un corte que eliminó a mis 2 enemigos.
Akara curo a Larzuk, mientras éste nos relataba la matanza. Nos contó que las hordas habían sido enviadas con el fin de aniquilar todos y cada uno de los habitantes de esta región, arrasando pastos, destruyendo casas y matando niños mujeres y ancianos. Todos ellos bajo el mando de un general despiadado llamado Shenk, cuyas máquinas infernales sembraban muerte y destrucción...
-"¡No sigas Larzuk!" -le interumpí. - "Esta noche saldre a la caza de shenk!"
- "Shenk, aún herido, quería seguir en su intento de defender la entrada a las Tierras Altas, donde aún hay prisioneros" - dijo Larzuk-
- "requerirás armas y aliados para poder luchar contra esos malvados diablos." - Interrumpió Akara - "Aunque después de varios muertos, seguro que te notaras mas fuerte"
- "Paco, ten este escudo".- dijo Larzuk, el cual se fue, para volver con una
gran armadura, la cual me quedaba pequeña. -Está cachas el tio- asi que decidí que sin ella iba mejor; en vez de armadura me dió una toalla, que me tapaba lo más importante... Poco después descubriría que era la famosa "toalla del Rey Leoric", cuyas propiedades magicas me daban, +69 en la virilidad... Cool
Entonces AKARA me sonrio y me bendijo para que mi empresa de acabar con shenk fuera mas facil. Asi que sali de la cuidadela en ruinas a traves de su ahora ruinosa puerta hacia el Asedio.
Al llegar vi cómo aún quedaban barbaros Valientes y con furia en los ojos, entregando su vida. Corrí para tratar de socorrerlos, porque los estaban rodeando y descubrí que ante mi presencia, los barbaros se hacian mas fuertes.
Ya que les inspiré confianza, decidí dar lo mejor de mí para ayudar a salvar lo poco que quedaba en....HARROGHAT!!
En poco tiempo llegamos ante Shenk (el primo de Shrek), rodeado por todos sus guerreros, que se lanzaron contra nosotros lanzando alaridos de guerra y odio. Entonces nosotros decidimos responderles cuando a lo lejos vimos que caía un meteoro inmenso, que acabó con la vida de todas esas perversas criaturas.
- "¿Me echabais de menos?" - dijo una dulce y tierna voz.
Una hechicera (mazizorra) apareció de entre el fuego del meteoro sonriendo como si no acabara de aniquilar a nuestros enemigos, pero no venia sola, detrás de ella estaba el brutal druida lobo CERBERUS, ella era CALYSTO la dama de fuego y desenvainó una ardiente espada que despedía llamas, y dispúsose a acabar con los pocos enemigos que quedaban dispersos en ese tiradero de cadáveres que llenaba todo el panorama.
Ahi estaba, sus ojos fijos en mí me atravesaban devorando mis pensamientos, y despertando algo que creia olvidado hace tiempo. Me arrodillé ante su majestuosa belleza sin poder decir nada.
- "¿Quién eres?"-Dijo la bella dama de fuego.
- "Quien evade el pasado en pos del futuro" - respondí.
- "Espero, señora mía que podais ayudarme en esta misión vengadora porque si eres más obstáculo que ayuda... bueno, no necesito alguien a quien cuidar a cada paso".
- "Necesito que me acompañeis mi Dama de Fuego , haciá un lugar en el cual se encuentra el avatar de la diosa de la guerra y reclutar a los siempre aguerridos bárbaros.
La hechicera aceptó mi petición y el druida quiso acompañarnos.
CERBERUS dijo - "Se de un paso entre las montañas...andando..."
Y así partieron hacia las montañas, siguiendo siempre al druida. Nos detuvimos en un claro después de andar por horas y almorzamos porque ya teníamos hambre por andar vagando tanto de entre la niebla. Descansamos un instante, pero fuimos interrumpidos. Una voz firme nos saludo. Era un paladin del templario.
- "Soy Sturm Brigthblade, de la casa de la Rosa". - Dijo.
Reluciente armadura, pose firme y gran presencia. Me pareció un angel con cara de negro.
Parecía que le rodeaba una especie de luz celestial, que parecia protegerle e iluminar su noble espiritu. Sin embargo, algo en él no me gustaba; no confío en la gente que parece tan cristalina. Asi que pregunte:
- "¿Qué es lo que realmente te trae por aquí, paladín?"
- "Siempre que haya un lugar donde el mal busque ganar terreno yo no tendré descanso. Vine solo para ayudarlos".
Y nuestro grupo, ahora de 4, siguió viajando hacia peligrosas tierras, siguiendo su incansable camino en pos de una aventura que podría terminar incluso con nuestras vidas. Cayó la noche, hartos de viajar buscamos un lugar donde poder descansar. La dama del fuego interrogaba al paladin, mientras yo charlaba con Cerberus sobre lo buena y "fogosa" que estaba Calysto, sin embargo erberus era muy callado y no parecía oirme.
La noche paso sin problemas, y a la mañana siguiente nos despertamos en medio de una espesa niebla. Presentía algo y Sturm se iluminó con una luz, disipó la niebla revelando a lo lejos un templo....
- "El mal aseche" -dijo.
Cerberus se transformo en un enorme Lobo, y Sturm desenvaino su espada, que brilló como si tuviera luz propia, estabamos espalda con espalda, aun sin ver lo que nos acechaba. Con Colmillo de Acero en la mano, listo para todo. Al fin se mostró la criatura, un gran monstruo reptilesco y siguiéndolo unos 50 hombres reptiles furibundos, todos fuertemente armados.
Calisto dijo: - "Cerberus, a por el jefe! Sturm, Jorge conmigo!"
Corrimos hacia esa horda asesina mientras Cerberus se abría paso usando su gran velocidad, Calysto lanzó una bola de fuego derribando a un buen número de enemigos, entonces yo corrí hacia el otro lado, me asusté, y quería irme. Pero tropecé con una roca y caí, noté que debajo había un amuleto dorado. Me lo puse y note que controlaba el fuego. Con mi nuevo control sobre el fuego, tomé nuevas fuerzas.
Mientras tanto...Cerberus atacaba con sus enormes garras al jefe pero éste era muy duro y amenazaba con derribar a Cerberus. Entonces intenté probar mis habilidades y le puse una hidra justo detrás. La distracción tuvo éxito y el Lobo pudo abatir a esa criatura infernal pudiéndo como el rayo arrancarle la armadura y dejarlo a merced de los buitres que rondaban esperando el momento del festin. Cerberus no los hizo esperar y le arrancó la cabeza de un tajo, pateándola después. Sin el mandato del jeje, los otros atacaron sin control.
Como una saeta entre las llamas, observamos una especie de golem que surgía entre los cadáveres, y junto a él varios deformes esqueletos.
- "Lo sabía...más enemigos, estamos perdidos". -pensé
- "Oh no!" - dijo Cerberus- "Me temo que..."
Sus palabras fueron de desgracia, pero un nigromante apareció entre la niebla.
- "Soy Raistlin el Mendicante. Puedo ser aliado o enemigo. Decidid!" -susurro
El necro gesticuló algo y el ejército de si-muertos embistió. Calysto hizo un muro de fuego ante los muertos y dijo:
- "Somos sus servidores" -dijeron los esqueletos- "Vamos donde él vaya y atacaremos a quien lo ataque".
Miraron al Necro con desconfienza. El comandaba una gran legión de muertos vivientes que serviría como apoyo. Ahora tenía un nuevo acompañante más interesante que los demás. Su rostro mostraba que llevaba muchas batallas contra muchos enemigos y esos ojos eran reflejo de batallas jamás peleadas antes.
Me acerque a Raist para aprender su oscuro arte, pero derrepente se reveló contra mí y me miró, me dejó paralizado en el sitio sin poder moverme y usé mi Toalla del Rey Leorik con +69 de virilidad para demostrarle que no era ningún alfeñique y ganarme su respeto. Y así vio que era un hombre poderoso, digno compañero de la batalla, de la guerra y de la conquista. Con el tiempo me creó un golemcillo de arcilla propio, el cual me será fiel, agradecido y cruel con mis enemigos a los que les robará el dinero de los almuerzos y al que podré moldear a gusto cuando me aburra. El que me ayudará en la batalla, para que nuestra alianza se fortalezca y cada vez seamos más fuertes, hasta que seamos invencibles.
Tras descansar seguimos camino hacia las montañas buscando el oráculo. Se hacía de noche nuevamente y habría que buscar un sitio. Dormimos plácidamente y la mañana siguiente decidimos algo importante primero tomaríamos desayuno y luego seguiríamos caminando sin parar. Caminábamos por un bosque cuando sentimos que alguien nos seguía. Era una bella amazona:
- "Me llamo Selene, bonito golem." -dijo.
Se acercó a nosotros y continuó:
- "Podeis ayudarme? Vereis hordas de esqueletos se han extendido como plaga por todo mi reino, atacando a las poblaciones, matando todo lo que es puro y bello. No se detienen ante nada. Mi reina me mandó a buscar ayuda, son tiempos oscuros y me he arriesgado a ver la situación de los alrededores.
- "Basta de tanta chachara jovencita". -dijo Calisto. - "Dinos que quieres".
- "Sólo quería unirme a ustedes, porque me aburrí de ser..."
- "Sólo quería unirme a ustedes, porque me aburrí de ser una humilde campesina que trabaja de sol a sol plantando mis queridos algodones y practicando con la javalina. Se me da bastante bien. Ahora quiero vivir aventuras propias, lejos del campamento. Asi que si me aceptais, juntos podremos derrotar al Mal".
- "Vamos entonces" - dije.
Y así nuestro grupo de seis continuó hacia las tierras de las amazonas para derrotar al gran demonio devorador de vírgenes, y ganarse el favor de Selene. Asi, ella nos podria acompañar al oráculo más adelante.
En el camino conversaba con Selene para tratar de conquistarla, aunque parecía que ella tenía la cabeza ocupada en otras cosas. Caminando entramos a un claro, descubriendo un viejo templo al centro de un pequeño islote que parecía una calva en la continua arboleda. Encendimos antorchas y entramos. Reinaba una espesa oscuridad, algo extraño rompia el silencio, era como el murmullo del viento a lo lejos; nos acercamos rápidamente para ver de qué se trataba, pero cuando llegamos al lugar una extraña fuerza nos bloqueaba el paso. Era un campo de energía oscura, Cerberus se concentro para localizar su fuente. Se irguió todo lo que pudo y se puso a olfatear. De pronto sintió un olor muy peculiar, le recordaba la granja de cerdos que le familiarizaba su infancia aunque por debajo podía advertirse el olor de la muerte.
El druida se puso en cabeza del grupo y nos condujo a unas yermas extensiones de excrementos pÚtridos i blandos, puestos sin ningún orden, en un amplio pantano que debíamos cruzar. Al final veíamos un gran edificio que parecía un templo del que salía una luz muy tenue que parecía seguirnos. Se acercaba hacia nosotros, y Selene, con arco en mano, hizo disparar flechas cargadas de bondad contra la maldad de esa luminosidad. Pero comenzó a hacerse cada vez más densa y empezó a vomitar lava de fuego salida de la oscuridad.¡ Resultó ser un Clon del mismisimo Diablo !
- "Quién mierda ha vendido tantos anillos?"
Pero ya era tarde para reclamar. Ya estaba acercándose a nosotros. La batalla era inevitable. Nos desplegamos para mostrar superioridad numérica, pero él no se amilanaba, seguía avanzando hasta que se detuvo, dando un grito de furia hacia el cielo. Se abalanzó en ataque hacia nosotros, creando un estrepitoso estruendo a cada paso que daba con sus garras. Mientras corría lanzó una tormeta de fuego contra nosotros.
Sturm, el paladín, soltó un aura para que nos protegiera y gracias a ella pudimos sobrevivir al primer impacto. Tocaba atacar, entonces Sturm cambió el aura y nos dispusimos a correr hacia un bosquecillo para defendernos mejor y atacarlo por sorpresa, pero nos cortó el paso.
- "¡Toca atacar gente!". -dijo Cerberus lanzándose hacia el vientre de Diablo Clon, buscando cortarlo de una sola mordida. Mientras Selene y Calysto atacaban a distancia, los demás rodeaban al Clon para distraerle y para que no viera que Calysto preparaba el conjuro de ventisca para poder congelarlo y derrotarlo más facilmente, pero él la encerró en una prisión ósea para que no viera su objetivo. Decidió invocarla sobre ella porque no sabía donde estaban el nigromante y la amazona, que atacaban desde lejos.
Rápidamente decidí invocar a mi golem justo debajo de él para que le diera entre las piernas y derrotarlo facilmente. Pero vi que el clon no tenía pelotas, asi que le dije que le mordiera la cola. El clon saltó del dolor y huyó atemorizado, porque descubrimos su talón de Aquiles.
Luego continuamos nuestro interrumpida travesía hacia el oráculo. Buscábamos el paso entre las montañas, que estaban a cada paso más cerca de lo que ningun compañero se podria imaginar. Finalmente la partida alcanzó una entrada guardada por enormes estatuas. Se podía distinguir una serie de letras que decían "Aquí entrada al oráculo".
- "Llegamos". - dijo Calysto, deteniéndose a descansar.
Las puertas estaban firmemente cerradas, se requiere un conjuro mágico muy misterioso que poca gente se ha atrevido a pronunciar nunca. Discutimos sobre quién debería recitarlo.
- "Un conjuro que yo haré ahora mismo, ¡alohomora!"
!crack!
La puerta crujió, y el suelo se remeció con un gran estruendo. Del interior, largo tiempo sellado, salió un viciado y oscuro aire. El aire traía olores de cuerpos putrefactos y desperdicios fermentados. Tomamos unas antorchas aventurándonos en su interior, todo estaba muy oscuro y se oían extraños ruidos a nuestro alrededor. Tenía dudas sobre si seguir o darme la vuelta, pero debía mantener mi camino. Debo reconocer que tenía miedo, pero ya era demasiado tarde para volver. Así pues, avanzamos hacia un parpadeo de luz verdosa que veíamos a lo lejos. Mientras avanzábamos por aquel pasillo, se iba formando una silueta. Era de una figura encapuchada, se sentía un viento frio.
- "¡Es Diablo que ha vuelto!" - pensé, pero continué caminando junto a mi miedo.
Estaba temblando en aquel momento. La figura se quitó su capucha.
- "Los estaba esperando" - dijo - "Siganme"
Avanzamos un poco, hasta que vimos tres túneles que llevaban a sitios distintos.
- "No iremos a nungún sitio hasta que te presentes". -dijo Cerberus.
- "Pues no me presentaré hasta que no vayamos a algún sitio"- Respondí.
Sus miradas se cruzaron y el encapuchado no tuvo mas remedio que ceder.
- "Soy Tal Rasha, el Horadrim". -dijo. Todos nos miramos asombrados.
- "Sé lo que piensan" - continuó - "no puede ser que viva, pero trás la muerte de
Duriel conseguí regresar al mundo de los vivos gracias a mi poderosa magia. Le derroté y aquí estoy, con vosotros en unos tuneles. Os pido q me sigais en una peligrosa empresa".
Consultaremos al legendario oráculo sobre el mal que se aproxima amenazador desde el este cada vez mas rápida y peligrosamente. Así que seguimos al anciano Horadrim a través de la oscuridad en busca del Oráculo. Mientras pasábamos por los pasadizos de la cueva, oimos un ruido detrás nuestro. Nos volteamos; nada se veía, pero sabíamos que algo había ahí. Seguimos caminando con precaución hasta que por fin llegamos a una cámara más amplia. Las antorchas estaban encendidas y gracias a su resplandor se podía distinguir una gran sala en que había varios monjes reunidos. Tal Rasha nos dijo que eran nuevos iniciados. De repente, uno de ellos, que parecía ser el más devil, se desplomó y murió.
- "Aquí podéis ver la gran maldición que asola a los Horadrim. La nueva orden no tiene el poder que poseía antaño. Necesitamos de vuestra fuerza para aniquilar a Torc, Puño de Hierro; miembro del Gran Consejo. Es él quien nos maldijo".
- "Entonces tenemos que encontrarle y matarle, o persuadirle de que deshaga el hechizo".
- "No seas iluso" - me interrumpe Raistlin - "no podremos persuadirle de nada. La única opción es luchar contra él y vencerle o perecer en el intento".
- "Decidido entonces" -dijo Calysto - "Venerables Horadrim, destruiremos a Torc por vosotros".
Los demás estuvimos de acuerdo. Tal Rasha nos indicó el camino bajo la montaña para llegar hasta su escondite, desde el cual pusimos rumbo hacia las pantanosas selvas que rodean la ciudad perdida de Kurast. Mientras llegábamos a las puertas de Kurast, le comenté a Cerberus lo buena que estaba Calysto. Me comentó que se decía que ella se comía a sus pretendientes, así que mejor no intentara nada, porque me podía ir muy mal. Entonces continuamos, aunque no me pude quitarme de la cabeza la imagen de sus senos carnosos.
De repente, Calysto se giró mientras Cerberus y yo la estábamos mirando, se paró de golpe y nos dijo:
- "Tenemos cosas importantes que hacer. Dejád de decir tonterias".
El druida y yo nos miramos asombrados.
- "Siento que alguien se comunica conmigo, escucho una voz en mi mente, ¡siento frio!"
Entonces Calysto se desplomó en el suelo cayendo encima de una piedra que tenía forma rectangular y con unas estrañas inscripciones. Mi golem se adelantó, comenzó a leer esta escritura e hizo unas señas a Raistlin. El nigromante nos tradujo:
- "¡Parece ser que hemos encontrado la entrada al sistema de alcantarillado de Kurast!"
Descendimos unos tres metros por una angosta escalera, abajo el aire estaba viciado y con olor a muerte. Sturm Brightblade iluminó un poco el lugar con un aura mostrando una escena que les heló la sangre. El mismo suelo que pisábamos estaba completamente cubierto de cadáveres en distintos estados de putrefacción. Las paredes estaban manchadas de una sangre viscosa, y al fondo del pasillo se distinguian unas sombras. Avanzamos lentamente en la penumbra, hasta que vimos a las sombras, ¡eran zombis! Las infernales criaturas se alimentaban de los cadáveres de forma espeluznante. Sturm no lo soportó y lleno de furia se lanzó al ataque. Su ferocidad nos afectaba a todos. Nos sentiamos con ansias de terminar con ellos, todo ocurrió muy rapido. Cuando me quise dar cuenta, unos cincuenta zombies malolientes llacían a nuestros piés. Tenía las manos manchadas de sangre pero me sentía bien, mi corazón estaba lleno de ira y eso me gustaba. Me gustaba tanto que comenzé a ponerme nervioso. Miré al resto y vi que todos estaban ya bien. Pero yo seguía recordando las imágenes de lo sucedido, mi alma se cernía en la oscuridad. No podía parar de recordar el sentimiento de ira.
Ensimismado en mis pensamientos seguí a mis compañeros a través de las malolientes cloacas, el camino parecía tornarse hacia un angosto pasadizo que resultó ser la salida.
Una vez fuera pude respirar porfin aire puro, nos encontramos rodeados de árboles, en un frondoso árbol se veia a lo lejos un hombrecillo. Nos acercámos a ver quién podía ser aquél, y qué hacía en ese lugar olvidado...
- "Soy Khalim". -dijo el hombrecillo. - "Necesito vuestra ayuda para acabar con el gran consejo. Me trajeron vendado y me dejaron botado en este bosque, por cierto, ¿de dónde vienen?"
- "De la cueva de ahí" - respondió Selene - "síganme, yo los sacaré de aquí".
Tras varias horas de camino, llegamos a un gran claro en medio del bosque dónde había un hombrecillo sentado solo sobre una roca.
- "¿De dónde salieron?" - nos preguntó.
- "Salimos por esa cueva de ahí".
- "¡Vaya!, son los primeros que veo en mucho tiempo".
- "¿Quiere decir que somos los primeros en salir vivos de la cueva?"
El hombre asintió con la cabeza. Les hizo señales y se sentaron junto a él para escuchar su historia...
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Ultima edición por pableras el 22 May, 2005 - 09:32 PM, editado 3 veces
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Joanma
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Asunto:
Publicado: 22 May, 2005 - 03:16 PM
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Antiguo colaborador
1998
posts
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Miembro desde
05 Jun 2003 |
La historia ya quedó muerta hace tiempo, con lo cual aquí se pone punto y final.
Un saludo. |
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